Últimamente no paro de abordar guerras... la que nos atañe será comercial. Recién llegado a España, procedente de Holanda y avalado por sus satisfactorios resultados en ventas (400.000 títulos) llega el "librino", un nuevo formato de libro en papel que quiere combatir, nada más y nada menos, contra el libro electrónico, el e-book.
El librino es un libro compacto, cuya orientación es transversal respecto al libro de toda la vida. Es más pequeño y cómodo de sujetar con una sola mano. Su peso, además, es muy inferior al del libro convencional, y su precio también es más reducido (10 euritos).
Parece ideal para lecturas fuera de casa, que hoy en día son muy habituales en las grandes urbes en los desplazamientos en transporte público (metro, autobús, cercanías) y en los puentes aéreos. Se acabaron esos armatostes de buena edición que servían de cultivo de la mente y gimnasio personal (al tener que cargar con ellos todo el día)
La batalla, entre alfombras rojas, tendrá lugar estas navidades con la aparición de un batallón de 150.000 librinos en el mercado.
Yo no me voy a posicionar, podéis regalarme el que os apetezca.
Esperemos que del combate sólo salga un vencedor, la cultura.
¡Feliz lectura querid@s!
A mí el nuevo formato no me hace ninguna falta, porque ya me encargo de llevar bolsos bien grandes.
ResponderEliminarClaro, para un caballero será una gran ventaja, eso sí.
Feliz sabado, monsieur
Bisous
Tendrá fuertes brazos, entonces. Bolso o bazar, esa es la cuestión.
ResponderEliminarYo pocas veces leo fuera de casa, pero tendré que acostumbrarme, para contrarrestar las esperas vitales.
Feliz, Dame.
Un beso.
Si, ayer me entere de la noticia, lo mas gracioso es que los editan los fabricantes de Biblias. Con lo cual os podéis imaginas la sutileza y finura del papel.
ResponderEliminarSaludos.
Si Carlos, las hojas deben ser finísimas. Es una propuesta comercial más, algunas triunfan, otras se van por dónde vinieron pero tiran la caña por si acaso picamos el anzuelo.
ResponderEliminarUn saludo!
Sabía yo tu pensamiento antes de leerlo, Bea. Conozco tu pasión por el libro de toda la vida, lo que te gusta tenerlos en tus manos y lo que te cuesta deshacerte de ellos ;)
ResponderEliminarHe de confesar, aunque no quede muy de macho hombrío (algo que por otra parte no me preocupa), que a mí también me encantan los bolsos "XXL" (en las féminas).
Creo que si fisgas dentro de uno de ellos, puedes hacerte una idea aproximada de cómo es la portadora.
Un beso, cierra y agarra fuerte el bolso, que son malos tiempos.
Un beso!
Yo no sé si alguien pensará lo que yo, pero creo que estos dos productos no pueden hacerse la competencia el uno al otro, es como si una moto compitiese con un turismo, estoy de acuerdo en que ambos son dos medios de transporte motorizados y que los dos necesitan licencia (aunque diferente) para ser conducidos, entre otras tantas cosas en común, pero depende para qué fines se vaya a utilizar el vehículo y cuántas plazas se desee tener. Con esto pasa algo parecido a mi juicio, un e-reader (porque si no me equivoco e-book se llama al documento que soporta, ya sea doc, txt, pdf, etc...) es un aparato que imita a la página de un libro y que no se tiene que comprar otro si se quiere leer otro libro digital, esa es una de las ventajas entre otras.
ResponderEliminarEl librino es un libro impreso y encuadernado como los de toda la vida en papel, pero con la peculiaridad de que las hojas son más finas y la orientación la tiene cambiada, gracias a esa combinación ocupa mucho menos espacio y es más fácil de manipular; parece un gran invento a la hora de enfrentarse a un libro grande (tipo “Los pilares de la Tierra”) sobre todo si el lugar donde se va a leer no es en casa.
Las diferencias entre ambos a la hora de comparar son abismales, ya no sólo por las características, sino por el precio, pero vamos, que sigo viéndolos muy diferentes.
Un beso y espero que para Reyes te caiga alguno de estos regalos, que con el blog te estás portando muy bien... je, je, je!
Pues te diré , Daviblio, que hoy por hoy no me atrae ninguna de las propuestas.
ResponderEliminarRechazo el e-book porque me encantan los libros, no sólo leerlos, sino como objetos. Les llego a coger mucho cariño;, les coloco mis marcapáginas, les pongo mi ex-libris, los ordeno, los acaricio,... Por tanto, e-book no.
En cuanto a los librinos, no sé, es que a mí me gustan lo libros grandes , de pastas duras, aunque tengo ya problemas serios en casa con el espacio. No sé... además no me parecen muy cómodos a una sola mano. De todas formas, los probaré a ver qué tal...
Un beso,
Cierto Fátima, no son muy comparables. Pero los dos pueden ser útiles para leer fuera de casa y los dos son alternativas al libro tradicional.
ResponderEliminarEl e-reader si me llama la atención, pero siempre preferiré el libro de toda la vida. La pena del libro tradicional es que no valgan la mitad, que creo no sería una locura. Pero está destinado a la clase media de edad adulta. Menos mal que las bibliotecas se encargan de ofrecer la cultura a los estratos sociales más humildes.
No estoy yo tan seguro de portarme tan bien. Esperaré carbón y todo lo demás bienvenido sea.
Un beso.
Carmen, eso es precisamente lo que buscaba. Una defensa rotunda del libro tradicional, y sabía la encontraría en vuestros comentarios. No esperaba menos de grandes lectoras, como tú. Explicas muy bien el valor emocional que tienen los libros.
ResponderEliminarUn beso y espero ganes terreno, para seguir construyendo tu biblioteca personal.
Bueno, imagino que los librinos, por muy minis que sean, seguirán conservando las cualidades propias de un libro de toda la vida; como Carmen señala, a mí, aparte de leerlos, claro está, me gusta tocarlos, sentir su textura al pasar las páginas y olerlos (me encanta el olor que desprende el papel), es como si conectaras más con el autor y la historia que narra, es un vínculo entrañable.
ResponderEliminarPor cuestiones de espacio veo bien el invento del e-reader, en un sólo CD´s cogerían miles de e-books, pero soy muy reacia a deshacerme de mis libros...
Un besote.
Nadie dice que te deshagas, jajaja. A no ser que te animes al book-crossing. Aunque cuesta mucho (puedes comprobarlo en "Pura vida ¿dónde estás?" entrada en vinividivinvi de Creatibea.
ResponderEliminarEl e-reader me gusta, pero eso de pagar 15 euros por unos megas de información... jode. Me gusta como elemento pirata, pero no por ello hemos de dejar de comprar libros.
Hay libros que es mejor adoptarlos para que vivan con nosotros, que ocupen su espacio e impregnen nuestros habitáculos de sabiduría.
Besos Fátima!