7 de noviembre de 2013

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La huída es el inicio del regreso


Huir es de cobardes, dicen. Puede que entonces sea uno de ellos, sin lugar a dudas nunca he sido muy valiente, ni siquiera lo he intentado.

Lo que voy a narrar en esta entrada reinicial es el conglomerado de motivos que me llevaron a hacer una parada de emergencia, un paréntesis blogero, un pit-stop o como prefiráis denominarlo. ¿Fue una decisión elegida o ineludible? No lo sé. A la deficitaria infraestructura tecnológica, (que siempre se convierte en un handicap cuando llega el buen tiempo) se unió una pésima superestructura emocional. Me explico; mi cabeza se saturó por la suma de unas circunstancias que me sobrepasaron. La mala situación laboral, mi agitado mundo interior y otras cuestiones que se escapan a todo entendimiento científico-racional provocaron la aparición de una enfermedad que me cambió por completo estéticamente, alteró mi autoconcepto y mi manera de relacionarme. 
Otro factor importante fueron mis relaciones personales, soy una persona que combina el gusto por lo desconocido con una manera de gestionar los sentimientos muy intensa y sin prever las consecuencias y daños futuros posibles de los actos. 
Otra llave maestra de mi derrumbe fue la perdida de una persona importante para mí, que me había aportado mucho sin reclamar nada a cambio, ese tipo de personas que me atraen. Un extraño acontecer que nunca quise admitir como real y preferí inventar hipótesis muy oscuras para mí, con tal de no creer su trágico y repentino final. 

He necesitado coger aire con este punto y aparte, para seguir con la enumeración. Un factor que llevaba tiempo haciéndome daño era la falta de capacidad de abrirme, de mostrar mis sentimientos a la hora de generar entradas, lo cual es una contradicción dentro de un espacio de carácter clandestino, pero soy así, un verdadero miedica. Entiendo que no tiene razón de ser escribir un blog en el que no te entregues a los lectores, en el que no estés capacitado para compartir lo más profundo de tu ser. 
El paso del tiempo tampoco ayudó; la perdida de blogs y personas que para mí eran referencia me hizo más vulnerable. 
Por último, mi manera de sentiros. Aunque os parezca mentira, mi nivel de sentimientos hacia vosotr@s no era saludable. Os he querido, os he deseado, os he necesitado. He vibrado con vuestros comentarios y os he esperado. Todo dentro de un barniz idealizador que es muy peligroso cuando se llega a una alta intensidad. 

Así ocurrió algo inevitable, una mezcla de materiales que crearon una roca muy sólida, fuerte, con capacidad de hacer mucho daño. Tardé tiempo en darme cuenta de que podría ser muy destructiva para la persona que estuviera más cerca, más dentro de mí. Otra enfermedad encendió los mecanismos de alerta, nunca estuve tan "a rastras", sentí que toda persona que se acercaba a mí, de manera profunda, era elegida por algún macabro destino. Me alejé de manera veloz, sin tacto, dejando una estela de sufrimiento inexplicado.

No he contado todo esto para justificarme o dar pena, sino que he sentido la necesidad de abrirme siquiera por una vez a vosotr@s.

Entendí que mi huída era el inicio del regreso en un espacio de elipses, ahora os doy las gracias por haberme leído y volver a volar conmigo. En especial a ti.
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16 comentarios:

  1. A veces huimos hasta de nosotros mismos…está en nuestra naturaleza. Pero supongo que somos siempre más fuertes de lo que pensamos y ese ser que nos habita y nos define, acaba saliendo a la luz llevándonos a donde él sabe que nos hará sentir ese equilibrio emocional, ardua faena sin duda en este mundo que ahora vivimos, pero irremediablemente imparable.
    Te felicito por haberte dejado llevar por ese río de emociones y pensamientos, y haberlos dejado aquí en tu entrada. Para aquellos que amamos la palabra y los sentimientos desde esa sinceridad libre que poseemos aun a pesar de que a veces puede resultar dañino, es un hermoso regalo que agradecer enormemente.
    Así que coge el aire que necesites, dirige tu mirada hacia esas cosas que están a tu lado, y sobre todo dentro de ti, abrázalas con fuerza, pues ese es tu momento, tu vida, lo que ahora tienes, y crece, aliméntate con lo que tuviste, cose las grietas de tus alas, y sigue volando, pues la vida está ahí esperándote.

    Un beso enorme desde este otro lado…y gracias ;-)

    Muaackss!!

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    1. Muchas gracias, Ginebra!!!
      Qué adorables palabras! Muchas gracias por tus consejos y tu apoyo.
      Un carro de besos.

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  2. Uff.. intensa entrada.
    Estamos aquí. Estoy con el móvil y no puedo escribir mucho. Pero aquí estamos. :-)
    Un beso.grande

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    1. Siento tu apoyo de manera igual. Te lo agradezco de corazón.
      Un beso de 50" pulgadas.

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  3. VALIENTEEEEEE!!!! Esta primera entrada después de todo los sucedido es de valientes!! Gracias por compartir tus sentimientos!

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    1. Gracias a ti, Vero.
      Bienvenida al blog. Un fuerte abrazo.
      ¿Huir no sirve de nada?

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  4. Se te estaba empezando a echar mucho de menos y eso sí que no puede ser, ya sabes que cada vez somos más los que creemos en utopías y tenemos que luchar todos juntos para intentar hacerla realidad.

    Me alegra que estés bien.

    Abrazote utópico, Irma.-

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    1. Gracias Irma. Utópico y pesimista. Contradictorio siempre. Pero rodeado de gente faro. Me alegra que sigas bien y luchando por tus utopías. Intentaré aprender...
      Un fuerte abrazo, valiente leonesa.

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  5. Me alegro tenerte de vuelta a pesar de que no comentaba siempre. Me parece bien que te hayas explicado pero creo que cuando se refiere a lo personal no hace falta, aunque espero que te haya servido de catarsis.
    Espero seguir leyéndote.
    Un beso!

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    1. No pongo palitos de quien comenta y quien no lo hace, todo el tiempo que paséis por aquí es combustible para mis vuelos.
      La catarsis es complicada, pero es interesante intentar renacer.
      Muchas gracias, amiga lectora, un besazo!

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  6. Pues hoy has dejado de ser un verdadero miedica. Hoy, como dice Verónica, eres un auténtico valiente. Espero que todo vaya mejor, que poco a poco todo se vaya superando. Muchísimos ánimos!
    Y muchísimos besotes!!!

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    1. Muchísimas Gracias Margari!
      Siempre he sentido tu apoyo incondicional y pienso que te alegras de mi vuelta. No, no soy valiente, puede que nunca lo sea. No es fácil, y puede que ni aconsejable, serlo.
      Recibo tus ánimos de manera animada.
      Una pila de besos!!

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  7. Mira dentro de ti, siéntete y disfruta de ello,porque lo más bonito no es lo que escribes, lo más bonito de ti es lo que sientes, lo que transmites en tus entradas, la calidad que en ellas entregas y el corazón que en ello pones. Porque yo, me niego a no leerte.
    Como eres tú, tan fácil de querer, tan difícil decirlo con palabras.
    No me cabe este abrazo en un mensaje... Pero mira detrás, mira tu estrella, brilla en la más profunda oscuridad de la noche. como tú mismo...Todos los vientos soplan a favor...
    Un abrazo grande.

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    1. :'') Me has emocionado mucho. Sabes que estás dentro de esta entrada, compartiendo sentimientos de dolor. Una pena que nos tuvieramos que conocer en lo trágico, una fortuna el hecho de haberte conocido.
      Me has dejado sin palabras, pero mi agradecimiento es infinito. Aunque sepa que no soy como me pintas, es tan bonito formar parte de un idílico lienzo...

      Un abrazo de 4 brazos y 3 almas.

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  8. Cobarde? Miedica? Hay que ser muy muy valiente para escribir una entrada cono esta, Daviblio. Yo sigo aquí y seguiré por mucho tiempo, pero sí es verdad que es recomendable establecer cierta distancia emocional. Por las posibles "pupas" posteriores, ya sabes... Una nueva etapa comienza, ¿verdad? Allá vamos...
    Besazos y un fuerte abrazo!!

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    1. Saco de Gracias, Carmen. Agradezco tus sabios consejos. Siempre me pareciste una genial gestionadora de sentimientos y sensaciones en tu blog. Sabes cuidar a la gente sin exponerte demasiado. Eres una gran blogera y es un honor tener la sensación de ser apreciado por ti.
      Un abrazo y múltiples besos, amiga.

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