Las bodas son una Institución en sí mismas, todavía hoy, en muchas culturas. Ceremonias fastuosas llenas de símbolos y contradicciones. Ocasión idónea para juntar de nuevo a las familias, en las que cada uno tiene su papel e importancia, un rol del que es muy difícil escapar.
El encanto de la película, a parte del intrínseco exotismo y colorido de India, es esa maraña de sentimientos que relacionan a sus personajes, el tratamiento del amor en diversas versiones o maneras de poder sentirlo. Las relaciones establecidas entre personas de distinta clase, las verdades oscuras que no convienen aclarar.
Pero el monzón, con sus lluvias torrenciales, no respeta a nada ni nadie, es fuente de verdad e igualdad. Todo lo moja, todo lo desvela.Hay dos maneras de afrontar una vida que te supera, la hindú es bailando.
Mójate y ve la película.
No la he visto, pero he leído buenas criticas, me la anoto en mi lista de pendientes.
ResponderEliminarSaludos
Una película magnífica. Por lo que cuenta, por lo que ves, por lo que oyes, por lo que calla, por lo que acaba explotando... La he visto miles de veces. Bueno, miles no, pero sí decenas. Me sé el 'Chunari chunari' de memoria y he perdido la cuenta de cuántas veces la he prestado o me la he llevado en el bolso a una tarde entre amigos. Y, por suerte, hace unos años la experiencia traspasó la pantalla.
ResponderEliminarUn beso bajo el Monzón
No la he visto, pero apuntada queda..
ResponderEliminarBesos!