Antes de que lleguen las doce y cambiemos de día, he de contaros una anécdota real. Me he dado cuenta después de que ocurriera. Estoy casi seguro de que a las 12:12:12 del 12/12/2012 estaba agarrando una docena de huevos en el supermercado. ¿Ha sido una curiosa coincidencia o se trata de una señal..?
Acabo de descifrar el jeroglífico -> aunque todo siga igual (repetición de doces) hay que echarle huevos a la vida porque es irrepetible.
¿Nos multiplicamos por 2?
Jajaja, ¡muy bueno! Hay que echarle sí, ¡y más de una docena! Un besico, guapo.
ResponderEliminarDavid, mira que era difícil añadir otro doce más a las 12:12:12 del 12 del 12 de 2012... Seguro que eso trae buena suerte.
ResponderEliminar¿Le echamos huevos? ¿Seguro?
Doce besos, en doce lugares diferentes
Eso es lo que en mi tierra se llama un "momentico". Irrepetible. Como todos los que dejamos escapar sin darnos cuenta. Sin duda, es una señal.
ResponderEliminarBsis desde mi momentico 15/12/12 a las 12:27:34.
Jajajaj, pues sí, hay que echarle, sí, pero tal y como está la vida una docena me parecen pocos...
ResponderEliminarBesoters!!!
¡Feliz año nuevooo!
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo, pero siendo prudentes, tampoco es bueno arriesgar demasiado.Una cosa es vivir con ganas y otra ir de valientes,que hay un dicho al respecto...
ResponderEliminarBueno, hace un mes que no escribes, espero leerte pronto.Besos y feliz año!