Esta noche os propongo este corto-cuento para ayudaros a conciliar el sueño (o no). Se trata de Granny O'Grimm's Sleeping Beauty dirigido por el irlandés Nicky Phelan. Una abuela que da una vuelta de tuerca al cuento de "la bella durmiente"
Terroríficamente gracioso :S
Pues nada...que no me ha quitado el sueño :D
ResponderEliminarPero me he reído, eso sí. Gracias :)
Beso
¿Dónde encuentras estas joyas? Te imagino buceando en Youtube para después traernos estos maravillosos regalos.
ResponderEliminarUn beso, y sigue, sigue.
Yo me he reído, vaya que sí, pero la futura madre de mis nietos o sea mi hija me ha dicho que esta abuela esta basada en mí y que por nada del mundo les voy a contar cuentos, jajaja.
ResponderEliminar¡Qué gozada de corto!
Besitos
Me ha encantado, ella es fabulosaaaa-
ResponderEliminarSaludos
Alma, me parece muy divertido también a mí. Fíjate que yo últimamente tengo problemas de sueño, pero no lo había achacado a esto. Lo consultaré con el médico.
ResponderEliminarUn beso!
Antonia, has dado en el clavo. Me alegra mucho que hayas imaginado tan bien la realidad de la gestación de estas entradas. Pero me alegra más acertar con mis elecciones.
ResponderEliminarUn beso y... sigo, sigo.
Es cierto, te parecerás a ella. Tienes la misma gracia y mala ...
ResponderEliminarMe encantaría haber tenido una abuela así.
Dile a tu hija que se prepare...
Un beso de buenas noches!
Y tan fabulosa, Clau. Después de bucear por cortos llegué a la abuelita O'Grimm y se acabaron las dudas. Por cierto, tiene página web, facebook y todo de lo famosa que se ha hecho (merecidamente).
ResponderEliminarUn beso!
Jajaja, es divertidísimo, me encanta la escena del nacimiento de la princesa, más que salir del vientre de su madre parece que la han chutado como un balón :-DD He recordado mientras veía el final que cuando tenía seis años y pregunté a mi madre qué se siente al morir, mi madre (con toda su buena fe) me contestó que era como dormirse y no despertar jamás. Yo era y soy una "niña" extremadamente sensible e impresionable. De esto hace treinta y cinco años, y aún no me he recuperado. Dormir se me da fatal, mi madre debió ser más cuidadosa.
ResponderEliminarUn beso y gracias por pasarte por mi blog :-)
pobre criatura, con una abuelita asi se va a gastar un pastón en psicólogos cuando sea mayor, jajaja.
ResponderEliminarMuy buen corto.
Un abrazo.
Cómo me gustan estos cortos que encuentras! Me los estoy viendo todos de seguidillo, que a pesar de mis intermitencias blogueras, me lo leo y veo todo.
ResponderEliminarComo dicen por ahí arriba, es que me parto con el parto! A más de una amiga mía le hubiera gustado que hubiera sido su experiencia tal que así. ;D
Jaja me he reído un monton, de verdad esta genial.
ResponderEliminarUn saludo
¡Me encanta! Es un corto genial, lo que me he reído, sobre todo con el parto, que parece un cohete en vez de una niña saliendo del vientre de su madre... jajaja! Y las hadas jóvenes son para partirse, vuelan de forma rarísima, como si les hiciesen daño los tacones... jajaja!
ResponderEliminarSiempre he simpatizado con los villanos de los cuentos, el hada anciana de este cuento es realmente un personaje genial, hace bien en lanzar maldiciones con esos poderes que tiene... ¿Pero qué es eso de no invitarla? Esta gente de palacio no debe saber que hay que tener a los amigos cerca, pero a los enemigos todavía más cerca.
¡Un besazo de fábula y que tengas dulces sueños!
David, ¡cómo me ha gustado el corto! La abuelita es fabulosa, aunque un poco tétrica. Ya no soy una niña pero me ha dado un poco de miedito. Más allá de las risas, la historia no deja de reflejar una realidad: la de las personas mayores que se sienten apartadas de la sociedad, que tienen la sensación de que no sirven para nada y que no interesan a nadie.
ResponderEliminarUn beso narcótico
La sensibilidad no debería perderse con los años, Ana. No podemos vagar por el mundo sin que nada nos importe. Creo que todos somos sensibles, de una u otra manera, pero algun@s lo disimulan que da gusto.
ResponderEliminarProspero año 2012, sensible y bonito para ti, Ana Márquez!
En psicólogos, para que sigan dándole dosis de terror? Jajaja.
ResponderEliminarUn beso, Isa. Te deseo un gran 2012, a ti y a los tuyos.
Lola, supongo que te refieres a tus amigas cómo parturientas y no cómo bebés propulsados. Osea que te has pegado un festín de cortos. Gracias por encontrarle la utilidad a las etiquetas (y eso que no están de pre-rebajas).
ResponderEliminarFeliz Año, chicarrona con glam del Norte. Mucha salud y caprichitos 4U!
Me viene "al pelo" esto de no conciliar el sueño, ya que es un problemilla que estoy padeciendo últimamente. Pero no por miedos, aunque me encantaría tener una abuela tan terroríficamente chachi.
ResponderEliminarQue se cumplan todos tus bellos sueños en 2012, Fátima. Al menos parte de ellos (deja algo para los años siguientes...
Buena radiografía del corto, Dorothy. Si monto un hospital serás la encargada de la radiología. Mucho éxito y placer para ti en 2012 (por no repetirme demasiado). Un be... (me dormí)!
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